Abismo entre política de AMLO y confrontaciones en Morena SLP
Por María Elena Yrízar Arias
La historia de participación política de Andrés Manuel López Obrador se inició primero como dirigente estudiantil en Tabasco en 1968, luego participó en el equipo electoral de Carlos Pellicer, de 1977-1982 fue director del Instituto Nacional Indigenista del estado de Tabasco. Durante este tiempo convive con los indígenas chontales.
En 1988 fue postulado por primera vez como candidato a la gubernatura de su entidad por el PRI, partido político en el que militó inicialmente y, al argumentar fraude en su contra, se inició un movimiento social importante llamando a la resistencia contra el fraude encabezando lo que se denominó Caravana por la Democracia.
Dirigió movimientos contra Pemex para pedir indemnizaciones para los campesinos y los pescadores afectados por la actividad petrolera en Tabasco. Luego fue presidente nacional del PRD de 1996 a 1999; y por ese partido ganó las elecciones a Jefe de Gobierno del Distrito Federal. En el intento por dejarlo fuera de la contienda presidencial de 2006 encabezó un movimiento social multitudinario contra el desafuero que le promovió desde la presidencia Vicente Fox, además de todo lo que siguió al fraude electoral de 2006, donde fue candidato a la Presidencia de la República.
AMLO volvió a participar como candidato residencial en julio de 2012. Tras perder las elecciones presidenciales, López Obrador reclama que hubo fraude electoral y solicita un recuento de votos. 31 de agosto de 2012: el tribunal electoral de México defiende la legalidad de la elección y declara a Enrique Peña Nieto presidente de México. Para 2014, López Obrador funda un partido político: Movimiento de Regeneración Nacional, conocido como Morena, y para el primero de Julio de 2018, ganó las elecciones federales a la Presidencia de la República, con el 53 por ciento de los votos.
El 14 de octubre pasado, el analista político Eduardo Martínez Benavente advirtió que existe una ruptura al interior de Morena en San Luis Potosí, entre el senador Primo Dothé Mata y Gabino Morales, ahora coordinador de programas sociales del gobierno de AMLO, e hizo referencia a otro antecedente de fecha 15 de septiembre: Edson de Jesús Quintanar Sánchez, Angélica Mendoza Camacho, María del Consuelo Carmona Salas, Marité Hernández Correa, Pedro César Carrizales Becerra El Mijis y Mario Lárraga Delgado, del Partido Encuentro Social (PES), denunciaron en conferencia de prensa la intromisión de Gabino Morales en las decisiones internas del bloque Juntos Haremos Historia, de intentar imponer negociaciones en el reparto de comisiones y de quitar al coordinador parlamentario, sentado a un lado estaba el senador Primo Dothé Mata.
Esto evidenció la división que existe en Morena estatal. La prueba más reciente de este tipo de problemas la dieron ayer en conferencia de prensa donde militantes del partido aseguraron que Sergio Serrano, presidente estatal de Morena, ha causado un daño económico y malversado un millón 900 mil pesos que recibió del INE en las pasadas elecciones. Pidieron que renuncie o que lo echan y aseguraron que el INE les ha aplicado una sanción de 4.5 millones de pesos, según se ha dicho, por falta de un manejo fiscal interno que les solicitó el INE, entre otras cosas.
Debemos recordar que AMLO fue interrogado por la prensa sobre un asunto de partido que tenía que ver con Gabino Morales, el delegado estatal del Gobierno Federal, a quien se le suspendieron sus derechos políticos dentro del partido en el estado y molesto el Presidente dijo que había venido por un asunto de presentar el programa de la canasta básica en Cedral y sugirió que se dejaran de grillas políticas. Desgraciadamente, aquellos militantes de Morena que quieren tumbar a Gabino Morales no entendieron el mensaje del Presidente, que fue muy claro. No les hizo caso. Y no han tenido la habilidad de entender que el Presidente está en la cumbre de su trabajo y sus seguidores deben seguir sus pasos y no desgastarse con pleitos internos que tanto desprestigian a la política en sí y al mismo partido.
A estas fechas, AMLO se ha convertido en el Presidente mexicano más popular y aceptado. Por los cambios que ha hecho para combatir el robo a Pemex de casi 800 pipas de gasolina al día por los llamados huachicoleros. Ha fortalecido al peso con relación al dólar, entre muchas otras acciones que han sido ejemplares para todos. El Presidente ha demostrado tener liderazgo moral, entre otras muchas cosas. Le ha puesto un alto a los abusos, bajó salarios de funcionarios, suprimió gastos innecesarios. La mayoría de sus acciones son aplaudidas por el pueblo.
Ayer surgió otra de esas grillas, que denotan el triste nivel que tienen los políticos potosinos de ese partido que no han entendido la política de su Presidente, cuando Joaquín Muñoz Mendoza, en rueda de prensa, le advierte al presidente estatal de Morena: “O renuncias o te echamos”. Miren señores militantes de Morena, la vida política interna de su partido resuélvanla adentro de su casa política. No olviden que la ropa sucia se lava en casa.
No ventilen sus problemas internos a la luz pública, mejor díganse las cosas de frente, en sus caras y resuelvan sus diferencias con el diálogo interno. Sus diferencias y acusaciones no le hacen ningún favor a AMLO. Mejor observen a qué nivel se encuentra AMLO, que nada tiene que ver con el nivel de la política de ustedes con sus pleitos tendientes a tumbar al delegado Gabino Morales y al presidente del partido estatal. Señores, hay instancias jurídicas donde se ventilan los problemas internos de los partidos. Concurran a ellas, dialoguen… así de fácil.
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