La pluma del perro negro
4 enero, 2017

Gasolinazo 2017

Por M.C. José Luis Arguelles O.

Me da mucho gusto poder compartir algunas líneas con ustedes, estimados lectores, así como agradecerles su preferencia por esta columna deseándoles un feliz año nuevo 2017. Lo prometido es deuda, va la tercera entrega, hablando de la calidad percibida.

Creo que ante las circunstancias que estamos viviendo en el país, tendré que alargar el tema de la calidad percibida a cuatro entregas, ya que esta tercera entrega la estaba preparando para escribir acerca de la calidad percibida en los servicios primarios del ayuntamiento. Esa entrega tendrá que esperar, ya que me gustaría abordar el tema que actualmente esta encendiendo literalmente el país, la gasolina.

Como todos sabemos el Gobierno de la Republica tomó la decisión de aumentar los precios de la gasolina y el diesel a partir del 1 de Enero del 2017, en lo que se conoce como “gasolinazo”. Los mexicanos somos expertos ya en este tema, por lo largo del tiempo. Sabemos también que el gobierno recauda dinero por este medio, ya que por el momento este “negocio” es un monopolio. Y es que mi estimado lector, no me creerás que en el año de 1993 yo llenaba el tanque de un bocho con $47 pesos. ¡Exacto! 47 del águila por un tanque lleno de un bocho, llegando a la gasolinera únicamente con la reserva del tanque.  El día de hoy, 4 de Enero de 2017, necesitas casi $650 pesos para hacer lo mismo (considerando gasolina magna, ya que en 1993 no existía la Premium). Estamos hablando que la gasolina se ha incrementado un… ¡1380% en 24 años estimado lector! En un país donde el petróleo representa lo más “preciado” económicamente que tiene.

Figura 1. “Tanque lleno”[i]

Es triste ver como los gobiernos toman este tipo de medidas sin pensar en las consecuencias. Y es que, como todos sabemos, no es solo que la gasolina y el diesel suban de precio, sino que todos los productos que son transportados suben de precio por efecto dómino. La inflación se va para arriba y…. de ahí para adelante no hay quien pare un efecto económico negativo. La mayoría recordamos con pesar la gran crisis de 1995, aquella que hundió temporalmente al país, y de la que el único que lo saco fue el precio del petróleo. Pero las cosas han cambiado con la reforma energética y dudo mucho que el petróleo nos salve esta vez si se llega a dar una crisis de esas magnitudes. Agregar también mi estimado lector que yo soy plenamente apartidista, pero si debo mencionar que el PRI es experto en meter al pueblo de México en estos aprietos, según lo que mi corta experiencia como ciudadano recuerda. En aquel terrible momento económico para México, vivir como ciudadano de este país era denigrante, ver como se devaluaba tu dinero y como tus deudas, si es que las tenías, crecían para dejarte en la bancarrota. Hubo mucha gente que se la jugó e invirtió grandes capitales en el país, para después ver como su dinero se esfumaba para ir a parar a la bolsa de unos cuantos políticos. Y es que, el que no recuerda su pasado, está condenado a cometer los mismo errores en el futuro, dicho muy popular. Desgraciadamente los mexicanos carecemos de memoria.

En fin, la remembranza era solo para poner un contexto. En estos tres días que apenas llevamos en el 2017, hemos visto muchas acciones que ciudadanos, asociaciones y transportistas están haciendo a lo largo del País. Bloqueo y toma de gasolineras, marchas, toma de oficinas recaudadoras del gobierno, e incluso la toma del palacio de gobierno de Aguascalientes. Mi amplio reconocimiento para los auténticos ciudadanos que están llevando a cabo estas acciones, siempre es algo admirable salir de tu estado de confort para inconformarte respecto a la mala calidad de un servicio o producto recibido, o cuando el precio del producto no corresponde con el mismo. Además creo que el hartazgo social de los ciudadanos de nuestro México está llegando a su límite. Son años de represión social e inseguridad la que acumula nuestro pueblo. Son años de ver como los gobernantes, presidentes, diputados y demás se atascan los bolsillos con nuestro dinero y se largan del país protegidos por el Presidente a cargo, para después regresar como si nada hubiera pasado y volver a tomar puestos políticos y cuando alguien les reclama su ratería, terminan indignados. Los ciudadanos de este País están cansados de ver la impunidad con la que operan los políticos y los funcionarios, la riqueza que acumulan a costa del pueblo, mientras que la población tiene que pagar cada vez más por servicios básicos. Creo que el resultado de todo esto se está viendo en estos momentos en las calles.

Pero, ¿Tú y yo como ciudadanos comunes que podemos hacer? ¿Cómo podemos lidiar con la impotencia de esta alza excesiva de precios que se viene? ¿Cómo sopesar que el gasto semanal ahora será de un mínimo de 20% mayor al de la semana pasada?

Respeto ampliamente a la gente que está haciendo algo, sea legal o ilegal. El detalle está en que si tú, estimado lector no quieres salirte de lo que la ley establece… ¿Qué puedes hacer? ¿Conformarte? ¿Pagar más y perder tu poder adquisitivo? Pues bueno, mi opinión es que puedes manifestarte pacíficamente, dejar ver tu inconformidad en las calles, gritándolo. Actuar en núcleos ciudadanos, analizando los medios legales para revertir los efectos de las decisiones del gobierno. Asesórate, trabaja en equipo, únete, que tu núcleo este conformado por múltiples profesionistas que se apoyen en las decisiones. Abogados, Ingenieros, Licenciados, Médicos, etc… En esta lucha contra Goliat nadie esta de menos.

¿Qué más puedes hacer? Consume energía de forma eficiente. Comparte tu auto, camina, utiliza tu bicicleta, organiza tu agenda para que no des vueltas en vano. Ahorra agua, luz. Compra productos locales o estatales, entre más cerca este fabricante del producto o el prestador de servicio más baratos serán. Toma agua de frutas, no consumas refrescos. Ahorra tu dinero y no gastes demás, gasta en tu calidad de vida, cultura, viajes, libros… Pero principalmente sé organizado y ordenado, piensa y cuestiona todo, pregúntate… ¿Cómo podría hacer esto de mejor manera? Además inculca esta forma de vida a tus hijos.

Figura 2. Ahorro[ii]

Ahora que sí tú equipo o núcleo van a tomar decisiones más drásticas, primero piensen… ¿Qué acciones son las que realmente afectan al gobierno? ¿Crees que la toma de una gasolinera le afecta al poder? ¿Incendiarla? ¿Robarla? ¿Bloquear carreteras?…

Creo que hay que ser más pensantes y menos viscerales. Si de veras quieres afectar al gobierno, afecta la recaudación de impuestos, bloquea las oficinas de Hacienda, las oficinas de catastro, las oficinas de recaudación del municipio, ese sí que les interesa, sobre todo al inicio del año. Deja o pospón lo más que puedas la paga de impuestos (predial, tenencia, multas, etc.) Impide que las cámaras de diputados y senadores se reúnan, exponlos públicamente, oblígalos a escucharte. Obliga a que las casetas de peaje no cobren, que en este país no existan las carreteras de cuota, nomás impuestos para el gran poder copetón.

Mi estimado lector, yo como tú somos finalmente solo ciudadanos, somos aquel perro negro que los políticos adoptan y consienten mientras están en campaña, pero que cuando logran el poder, olvidan nuevamente lanzándolo con un puntapié a la calle y dándole la espalda para apoderarse de lo más que pueden. Y como ya te dije, esto finalmente solo es mi opinión.

Recibe un abrazo de tu amigo el perro negro y nos leemos muy pronto… ¡Saludos!

[i] http://dealante.com/index.php/cnodo/show/22548

[ii] http://www.granvalparaiso.cl/tendencias/un-ano-sin-comprar-nada-siete-consejos-para-ahorrar/

 

Egresado de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, de la carrera de Ingeniero Mecánico Administrador, con una experiencia profesional en la industria manufacturera de 12 años en diseño Mecánico y una experiencia docente de 10 años. Maestro en ciencias en sistemas de calidad y productividad por el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, intento aplicar los principios de liderazgo, calidad y eficiencia. Disfruto leer, escribir, hacer ejercicio y gozar el tiempo libre con mi familia. Me gusta viajar a lugares que nunca he visitado y conocer gente nueva. Actualmente estudio el Doctorado en Ciencias e Ingeniería de materiales, haciendo investigación en aceros.

 

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