EL CENIT
Por: Raúl Axel Mayorga Molina
Seguridad y paz en México
Cuando escribí esta columna, tenía pensado abordar otros temas, pero los eventos de los pasados dos días me hicieron reconsiderar. El 13 de noviembre, seis ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) se pronunciaron por declarar inconstitucional la Ley de Seguridad Interior. Faltan dos votos más para que eso ocurra y todo parece indicar que así será y que el Máximo Tribunal echará abajo una de las legislaciones más escandalosas del sexenio que está a nada de concluir. Los ministros y la ministra que han aclarado hasta ahora el sentido de su voto han dicho que la LSI regula el uso de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública, cuando esa NO es su función, a menos que se invoque el artículo 29 de la Constitución, algo que no ha ocurrido hasta ahora. Además, indican que el Congreso carecía de facultades para legislar sobre esto, pues militares y marinos no pueden hacer lo que es tarea de las policías. Por ello la LSI caerá. Sin embargo, algo más preocupante fue dado a conocer ayer.
El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador anunció su Plan de paz y seguridad 2018 – 2024, con el que pretender lograr la pacificación del país, tras 12 años de confrontación con el crimen organizado. El punto sustancial del plan lopezobradorista es que pretende reformar la Constitución para que ahora sí los militares puedan asumir las tareas de seguridad pública que tanto señaló en los gobiernos de Calderón y Peña y que es el punto neurálgico de la LSI que la Suprema Corte desactivará.
Mientras veía la conferencia de AMLO pensaba dos cosas: primero, cedió ante las fuerzas armadas y les dará más poder y segundo, implícitamente el próximo presidente reconoce que las policías del país no tienen remedio y es mejor crear un cuerpo de la nada (la Guardia nacional) con marinos y soldados en un primer momento y jóvenes civiles después. Eso es grave, porque es admitir que nada se puede hacer y por ende el control de las 265 zonas en que se dividirá a México para el mando en seguridad deberá recaer en miembros de las fuerzas armadas.
En los regímenes democráticos, el uso de estas no debe extenderse por demasiado y, sin embargo, aquí vamos de nuevo con más de lo mismo, pero aderezado con otro discurso, uno cubierto de progresismo social. Es inquietante y creo que es necesario vigilar al nuevo gobierno y al Congreso, pues con una mayoría de Morena en él, cualquier cambio en la Ley fundamental para satisfacer los caprichos del presidente puede ocurrir sin demasiada oposición.
Todo esto se siente como un déjà vu. Lamentable.
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Raúl Axel Mayorga Molina (San Luis Potosí, S.L.P., 1990) es estudiante de la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública por la Universidad Nacional Autónoma de México en la modalidad a distancia. Contacto: mayorga@politicas.unam.mx.
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