La tragedia de Roble
Por José Ismael Leyva
La noche del Domingo 28 de Julio según la evidencia en video que comenzó a circular en redes sociales, se muestra un grupo de jóvenes que ataco a mansalva a una persona de sexo masculino, las imágenes con un alto contenido de violencia mostraron una escena donde la persona aun inconsciente recibía golpes y patadas en su cuerpo y rostro, aun cundo un par de mujeres trataban de interponerse entre el joven y sus atacantes y en donde al momento de la edición de esta nota la vida del joven pende de un hilo. Los hecho ocurrieron en conocida plaza en la avenida Roble de esta ciudad de Matehuala.
El problema segun fuentes que presenciaron lo sucedido, comenzó al interior de una bar que se encuentra a un extremo de la segunda planta de la plaza, ya que el lugar se encontraba asinado y con poca seguridad comparada con el gran numero de asistentes, cultivo perfecto para el inicio de cualquier pleito.
Después de mucho tiempo llegaría una patrulla que hizo absolutamente nada, vaya sin ni siquiera resguardar la integridad física del agredido, estando solo unos minutos en el lugar y volviendo a partir quien sabe donde.
El hecho no debe de pasar desapercibido para las autoridades municipales, no es cosa menor, las áreas comunes y el estacionamiento de la plaza donde fue el lamentable suceso, son parte del inmueble de la plaza, y al parecer solo la seguridad de los asistentes a los bares de la segunda planta solo les alcanza al interior de sus locales, pues éste joven fue cobardemente abatido aun en sus áreas comunes, donde no llego ningún tipo de ayuda o control de situación por parte de la seguridad privada del lugar; seguridad que los empresarios del lugar deben de asumir al brindar un servicio de entretenimiento o de cualquier tipo, el usuario de la plaza tiene el derecho a su bienestar físico por lo menos, cosa que evidentemente es nula en un lugar en donde asisten familias, jóvenes y menores de edad, y recuerden que no es un hecho aislado, pues en más de una ocasión, han habido lesionados como cuando un vehículo embistió a otro grupo de jóvenes en pleno estacionamiento del mismo lugar.
La seguridad de la población debería de ser una obligación tanto para la policía municipal, como para los prestadores de servicio de entretenimiento, el primero atendiendo las áreas publicas y las vialidades y la otra atendiendo una seguridad interna indispensable para que sus clientes asistan a esos lugares.
El domingo pasado fue una tragedia que nunca se impidió porque no hubo quien lo evitara, los asistentes solo se limitaron a observar la dramática escena, seguro pensando en su seguridad y otras arriesgando la propia ante un cobarde ataque.
La pregunta es: ¿Que medidas se tomaran para que no vuelva a ocurrir esto o esperaremos ahora si el siguiente incidente si haber hecho nada?
En corto
Gabino Morales declaro a éste medio que desconocen el tema del Grasero, ni municipio, ni el gobierno del estado han denunciado el hecho de contaminación por arsénico que afecta a la comunidad de Cerrito Blanco, el alcalde Alejandro Segovia declaro que fueron “unos ambientalistas” los que denunciaron el hecho sin decir quienes, ni cuando, ni si hubo un respaldo del municipio y al momento no hay un posicionamiento oficial del ayuntamiento que es el primero que debió de denunciar el hecho ante Semarnat y Profepa, simplemente por ser un caso grave de salud publica de sus habitantes, casi nada, la omisión también genera consecuencias.
Las declaraciones de Gabino Morales sobre la Presa la Maroma indica que es posible que se abandone el proyecto, situación que seria gravísima para el futuro abastecimiento del agua en Matehuala. El camino que conduce hasta la presa costo más que la propia cortina, esta fuera de toda lógica cancelar este proyecto, pero si ya lo hicieron con un aeropuerto internacional, con la mano en la cintura pueden hacer lo mismo con éste proyecto, elemental para la recuperación de los mantos acuíferos que abastecen de agua a Matehuala y el ahorro en costo eléctrico de su operación; ya no pedir que les alcance la visión incluso para detonar un proyecto turístico sustentable en la zona, con pesca y recreación para este oasis que sigue en el imaginario.
Innegable el cambio en iluminación en el municipio con la entrega de los circuitos urbanos de lámparas que van desde Robles, Carr 57, Hospital Ixtlero y Lerdo de Tejada, un acierto sin duda para esta administración. Las formas del proyecto las revisaran los entes responsables de ello.